Mi amigo Miguel

Miguel Angel Ruiz Matute y yo no nos conocimos en la niñez ni en la juventud, sino en la edad madura, hace unos veintinco años. Cuando tuve el primer encuentro con su obra, de inmediato me capturó. Me fascinó su cosmopolitismo, la madurez de su trazo y de su forma. No es para menos, se formó y depuró su arte en México, España e Italia, donde ha tenido múltiples exposiciones y ha ganado varios premios. Cuando lo conocí en persona, la inmediata empatía fue el origen de una amistad imperecedera. Porque como persona, es un gran amigo, senciilo y humilde. Gracias a él, creo en la interacción de las artes. Cuando conversé, con mucha pasión, sobre mi proyecto de la historia de Lempira y la cultura lenca, de inmediato me envió una serie de bocetos. Con su característica humildad me dijo: «Si te sirven, úsalos. Si no, tíralos». Por supuesto, todos sus dibujos ilustran mi novela MEMORIA DE LAS SOMBRAS. Su arte recuerda levemente el impresionismo de los franceses por el manejo de la luz, que difumina el trazo. Pero a diferencia de los Renoir, Monet, Degas, el objeto en la pintura de Miguel es absolutamente realista; los torsos y las espaldas parece cargar pesadas cargas; las piernas de los jugadores en su serie del Football, son miembros contorsionados, enredados tras una pelota; las manos que pinta son dolorosas, en tensión, dramáticas. De la serie «Lazarus» es impactante ver a este personaje bíblico emergiendo de la muerte, rasgando sus vendajes. En la serie «Tierras de pan llevar» transmite la infinitud en interminables montañas llenas de arboledas, así como tierras duramente calcinadas. Tanta pasión no puede ser menos que el reflejo de sus raíces, la dolorosa Hibueras se pierde en la noche de los tiempos y en la conciencia del artista. Nos quedamos cortos de encasillar a Miguel en el impresionismo o en realismo, en una corriente o en un estilo. Porque Miguel alcanzó su propia voz, la expresión que lo hace singular. Le corresponde el mérito de haber alcanzado en su arte lo que todo gran artista: la universalidad. Bienvenido maestro, que esta noche presentará una impresionante muestra pictórica de más de 100 obras de arte, en Banco Atlántida en Tegucigalpa, quien lo ha hecho regresar desde Londres, donde reside, para hacerle un homenaje y dar tributo a su obra. .